Hoy me toca contaros la historia de Bocar Drame.
En las aldeas trabajamos con alrededor 150 niños mínimo, con
lo que como os podéis imaginar es muy difícil conocerlos a todos.
Bocar es un niño muy tímido y pasa desapercibido, ni
siquiera es de Dembanje, es de una aldea muy lejana, pero su tío lo acoge en su
casa debido al gran interés del niño con los estudios. A su vez tiene a alguien que trabaja para él (en
este caso es así, su tío que es el Iman abusa de su posición, para tener a
Bocar todo el día sin parar, trabajando a cambio de darle de comer y que pueda
ir a la escuela).
Bocar nos conoce a través de un voluntario nuestro, se
cogieron mucho cariño, esta persona se da cuenta de que el niño estudia mucho y le
encanta, y se esfuerza cada día en el trabajo sin protestar para poder ir a la
escuela.
El año pasado cuando volvimos a la aldea Bocar no estaba, el
padre no quería que su tío abusara más del niño y que en un futuro lo mandará a
una escuela coránica (probable en un Iman) por lo que Bocar no podía ir a la escuela.
Fuimos con el jefe de la aldea y el equipo de Miradas a hablar con su padre y
el, sorprendido de que alguien hiciera por su hijo ese esfuerzo tan grande, nos
contó la situación. Nos comentó su alegría
al saber que nosotros nos habíamos fijado en su hijo y queríamos ayudarle a
estudiar y nos cedió totalmente la tutela del niño en cuanto a los estudios
para que pudiéramos conseguir que Bocar fuera de nuevo a la escuela.
Bocar volvió a la
escuela, ha sacado las mejores notas y ahora tiene que ir a Gambasse a
continuar sus estudios. Le hemos comprado una bicicleta para facilitarle el
poder ir al colegio y ayudar a su tío (con el que hablamos para evitar abusos
hacia su sobrino).
Es el niño más trabajador, respetuoso, y con más inquietudes
que hay en la aldea. Esperamos poder apoyar sus estudios hasta el final, que
pueda hacer una carrera porque él se la merece.
1 comentario:
¡Qué bonita es esta historia!
¡Qué buena labor estáis haciendo!
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